Cuando damos la bienvenida a un nuevo compañero peludo a nuestra familia, somos responsables de su salud y bienestar. Junto con las vacunas y una nutrición adecuada, la desparasitación periódica es fundamental para que nuestros amigos se mantengan saludables.

Es necesario establecer un calendario anual de desparasitaciones, tanto internas como externas para protegerlos de forma eficaz, utilizando siempre productos de calidad y eficacia contrastada, siempre con el visto bueno de nuestro veterinario.

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Importancia de la desparasitación

En cuanto a los parásitos, debemos aplicar la fórmula de más vale prevenir que curar. Es mucho más sencillo y recomendable mantener a nuestras mascotas protegidas de una posible infestación antes de esperar a que aparezcan y luego empezar a aplicar antiparasitarios.

 

"Es posible que no los veamos, lo que no significa que no estén allí".

Los parásitos son difíciles de notar cuando son pocos y algunos requieren pruebas específicas; si son fácilmente detectables en la piel (parásitos externos) o en las heces (parásitos internos), es señal de que la infestación ya puede ser bastante grave y, por tanto, más costosa de eliminar. En el caso concreto de las pulgas, pueden llegar a ser realmente molestas y difíciles de erradicar. Se reproducen rápidamente e invaden no solo a nuestro animal, sino que también pueden extenderse a zonas del hogar (especialmente textiles como alfombras y sofás), obligándonos a recurrir a potentes pesticidas para deshacernos de ellas de forma definitiva.

 

¿Por qué los parásitos son tan peligrosos?

Los parásitos, ya sean internos o externos, debilitan a nuestros amigos peludos y les causan todo tipo de problemas, como desagradables picaduras que pueden causar trastornos en la piel. Las más peligrosas son las diversas enfermedades que transmiten, algunas de las cuales son potencialmente mortales. En ocasiones, pulgas, piojos, garrapatas y mosquitos actúan como intermediarios de los parásitos internos, transmitiéndolos a través de la picadura al huésped final (perro, gato o humano).

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Enfermedades causadas

Estas son algunas de las enfermedades que más afectan a los gatos por falta de desparasitación:

• Anemia infecciosa felina : también conocida como hemoplasmosis o micoplasmosis, es una enfermedad parasitaria transmitida a través de pulgas, garrapatas y mosquitos, aunque también pueden transmitirse a través de mordeduras o heridas entre gatos. Las bacterias que causan esta enfermedad se adhieren a los glóbulos rojos, lo que provoca que los anticuerpos creados por el sistema inmunitario del animal destruyan estas células para combatir la infección. La eliminación de demasiados glóbulos rojos produce anemia en los gatos. Si no es tratado a tiempo por un veterinario, puede ser fatal. Afecta más severamente a los gatos que ya padecen enfermedades inmunosupresoras. Los síntomas incluyen disminución del apetito, fiebre, depresión, debilidad, palidez y pérdida de peso.
• Dermatitis alérgica (DAP) : Es la afección más común provocada por las pulgas y uno de los problemas dermatológicos más frecuentes en las consultas veterinarias. Las picaduras de pulgas siempre son incómodas e irritantes, pero muchos animales son especialmente sensibles a la saliva de este parásito. El picor y el dolor que sienten les dan ganas de rascarse sin parar, e incluso pueden hacerse heridas. FAD provoca alopecia, picor generalizado, erupciones cutáneas, costras, seborrea, oscurecimiento de la piel en las zonas afectadas y, en ocasiones, lesiones de pioderma.

Otras enfermedades como la Leishmaniasis y la Filariasis , a pesar de ser más comunes en perros, también pueden afectar a gatos y otros animales.

• La leishmaniasis es una enfermedad parasitaria transmitida por la picadura del flebótomo. Muchos animales infectados no muestran síntomas durante meses, años e incluso pueden no mostrarlos en ningún momento y quedar únicamente como portadores. La evolución de la enfermedad depende de la reacción que tenga el sistema inmunitario de cada individuo ante la infección. Los síntomas son muy diversos, podemos encontrar pérdida de cabello, heridas en la piel que tardan en cicatrizar, epistaxis, pérdida de peso y problemas digestivos, entre otros. Esta enfermedad no tiene cura, pero existen tratamientos para reducir los síntomas y el animal puede hacer vida normal en muchos casos. Sin embargo, los parásitos permanecen en el cuerpo de por vida y pueden aparecer recaídas.
• En cuanto a la Filariasis , se transmite por la picadura de mosquitos y, al igual que la Leishmaniasis, está muy extendida en España, aumentando cada año el número de casos registrados. Es causada por gusanos de 15 a 40 cm que se alojan en el corazón y las arterias pulmonares de nuestras mascotas, obstruyen los grandes vasos que salen del corazón y afectan el funcionamiento de las válvulas cardíacas. Puede causar daño que afecta órganos importantes como los pulmones, el hígado y los riñones. Los síntomas pueden tardar años en manifestarse e incluyen falta de apetito, cansancio, pérdida de peso, debilidad, hemorragias nasales, tos, hinchazón y problemas respiratorios. Si no se trata, puede causar la muerte.

Muchas enfermedades que transmiten los parásitos tienen tratamientos costosos y de larga duración, que requieren análisis de seguimiento y control. Los antiparasitarios son una inversión que nos ahorrará mucho sufrimiento a la larga, tanto a nosotros como a nuestros peludos.

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Parásitos externos

Hay muchos productos en el mercado para proteger a nuestros animales. Nuevamente tenemos que recordar otro dicho popular, lo barato puede salir caro. No debemos escatimar en algo tan importante como la salud de nuestras mascotas. Aplicar productos de dudosa eficacia y origen puede ser inútil, además de poner en riesgo su vida, ya que son sustancias químicas potentes que aplicamos tópicamente u oralmente en el cuerpo. Si tenemos dudas sobre cualquier producto , siempre debemos consultar a nuestro veterinario .

Los productos que utilizaremos dependerán de cada caso concreto. Si vivimos en una zona rural o urbana, si hacemos frecuentes excursiones al campo, la época del año (se debe aplicar más en los meses más cálidos). En el caso de los gatos, aunque no salgan de casa, es importante mantenerlos protegidos, ya que los parásitos pueden llegar a ellos a través de nuestra ropa o zapatos (algo más común de lo que pensamos) o, si tenemos un perro, a través de eso.

 

A la hora de elegir un producto, debemos prestar especial atención a qué parásitos externos protege y durante cuánto tiempo hacen efecto.

• Pipetas : Son un producto relativamente innovador, de rápida aplicación y su duración puede variar entre 2 y 6 semanas. La más común es una aplicación mensual.

 

• Aerosoles : Su acción es inmediata y están indicados especialmente cuando el animal ya está infectado por parásitos. La aplicación es más complicada ya que se debe pulverizar a contrapelo para llegar a todas las zonas. La absorción lleva tiempo.

 

• Collares : Cómodos y con una duración entre 3 y 8 meses.

Siempre debemos leer y seguir las instrucciones de uso y consultar a nuestro veterinario ante cualquier duda. Él podrá aconsejarnos sobre el producto más adecuado a nuestra situación y a los hábitos de nuestros peludos. Debemos mantenerlas protegidas durante todo el año, pero en los meses de más calor es recomendable combinar más de un producto insecticida para parásitos externos, por ejemplo pipetas y collar.

 

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