Las flatulencias o gases intestinales es un hecho relativamente común entre nuestros perros y gatos, traduciéndose en un gran malestar para quienes conviven con ellos. Algunos estudios indican que, aunque no es una de sus principales preocupaciones, la mayoría estaría dispuesta a hacer modificaciones en la dieta de su mascota si eso redujera las flatulencias.
Los gatos se caracterizan por tener unas necesidades nutricionales específicas: se les considera carnívoros estrictos, por lo que sus necesidades proteicas son superiores a las de otras especies. Esta peculiaridad determina en parte las características de su microflora intestinal, en la que hay más bacterias que utilizan como sustrato los aminoácidos proteicos.
El olor fecal es el resultado de la combinación de diferentes componentes volátiles, como compuestos de azufre, fenoles, amonio, aminas alifáticas, indoles y ácidos grasos de cadena ramificada. Estas moléculas se producen durante la fermentación de carbohidratos y proteínas en el intestino. También puede verse influido por otros factores, como el grado de actividad física o la composición de la dieta. Por ejemplo, los gatos que viven en el interior pueden tener un olor fecal más pronunciado debido a la lentitud del tránsito intestinal por falta de ejercicio, aumentando las posibilidades de fermentación intestinal.
Suplemento formulado en masticables altamente apetecibles para ayudar a controlar el mal aliento, reducir los gases y el olor de las heces
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Los gatos se caracterizan por tener unas necesidades nutricionales específicas: se les considera carnívoros estrictos, por lo que sus necesidades proteicas son superiores a las de otras especies. Esta peculiaridad determina en parte las características de su microflora intestinal, en la que hay más bacterias que utilizan como sustrato los aminoácidos proteicos.
El olor fecal es el resultado de la combinación de diferentes componentes volátiles, como compuestos de azufre, fenoles, amonio, aminas alifáticas, indoles y ácidos grasos de cadena ramificada. Estas moléculas se producen durante la fermentación de carbohidratos y proteínas en el intestino. También puede verse influido por otros factores, como el grado de actividad física o la composición de la dieta. Por ejemplo, los gatos que viven en el interior pueden tener un olor fecal más pronunciado debido a la lentitud del tránsito intestinal por falta de ejercicio, aumentando las posibilidades de fermentación intestinal.